Viviendas populares

17 marzo, 2014

El sábado 1 de febrero pasado la Cooperativa de Vivienda Los Pibes (COVILPI) realizó la preinauguración de su obra de 33 departamentos en el barrio de la Boca con la participación del padre Juan de la parroquia Caacupé de la Villa 21-24.11111En el acto el padre señaló que la bendición de la casa es una tradición popular en nuestros barrios y en toda la cultura de Latinoamérica, cuando el pueblo recurre a la invocación divina ante la enfermedad, el malestar y las dificultades y afirmó: “Seguro que con esta bendición de Dios habrá un nuevo impulso muy secreto para todos los que luchan, para todos los que aman esta causa de la vivienda digna”.

En consonancia con las palabras del Papa Francisco “una vivienda para cada familia” el padre Juan agregó, “una casa para que cada familia pueda construir un hogar. Si lográramos que cada familia tenga su casa, le haríamos un bien tan grande a estos chicos que el día de mañana crecerán con un sentido espiritual, un sentido de dignidad, con un sentido afectivo que les ayudaría a construir otras familias. Esto es invalorable.”

La COVILPI nació hace 10 años. Hace 7 años comenzó la construcción. Y debió estar terminada hace 3. Si no se termina es porque “el macrismo no quiere que demostremos que es posible construir a través de la organización popular, de la autogestión y que el sueño de la vivienda propia para los sectores populares en esta ciudad es posible”, precisó Luciano Álvarez, cooperativista. También enfatizó que “El problema de la vivienda en la ciudad que afecta a 500.000 se puede solucionar con la autogestión. No podemos nosotros solos. Necesitamos la fuerza de todos. Es una pelea contra las grandes corporaciones de la construcción,  el sector que respalda a Mauricio Macri. Aquí a 6 cuadras de Puerto Madero vemos con claridad otro modelo de ciudad diferente  con gran cantidad de viviendas vacías compradas con el dinero de la especulación, de la soja y el blanqueo del narcotráfico”.

En el mismo sentido, Alicia Díaz, presidenta de la COVILPI remarcó que “esta es una pelea que se puede ganar a pesar del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, que no piensa en las necesidades de nuestra gente sino que piensa en sus negocios. La vivienda es algo muy importante aquí y en toda la Argentina. Por eso los invitamos para que nos unamos en esta lucha para seguir mejorando el presente y el futuro de nuestros pibes”.

El Director técnico de la obra, el arquitecto Jaime Sorin denunció que “en estos últimos meses tuvimos 3 certificados sin que el Instituto de la Vivienda Cooperativa (IVC) los pague. Esto para cualquier cooperativa sería el fin. Ésta solo ha continuado por el esfuerzo y la persistencia de los compañeros de la COVILPI y de la organización social. Hoy la obra está casi terminada. Sólo nos falta un millón y medio de pesos. Sobre un presupuesto de la ciudad de 60 mil millones de pesos. Y pese a que desde que Macri está a cargo de la gestión, desde el 2007, el presupuesto para el área de vivienda se redujo de un 5 a un 2%, aún así tienen mil millones de pesos aprobados por la Legislatura, que no lo utilizan. Queda claro entonces que la discusión es de voluntad política, con la intención que este tipo de experiencia no se conozca. Que este tipo de construcción es mucho más económica que el modo que realizan las grandes corporaciones. Si esto se demostrara el déficit de vivienda de la ciudad se podría disminuir enormemente”.

En el cierre, el Coordinador Nacional de la Organización Social y Política Los Pibes, Lito Borello, hizo referencia a la ley 341 que nació a partir de la inteligencia colectiva que las organizaciones populares, durante muchos años, han sabido construir desde la lucha, donde muchos han perdido la vida. En ese momento se recordó con emoción al primer presidente de la COVILPI, Martín Oso Cisneros. “Todos lo llevamos en nuestro corazón como bandera de nuestra lucha”, sentenció Borello respaldado por la gigantografía con el rostro del compañero asesinado por un sicario de la policía hace 10 años.

Destacó además el espíritu superador de la ley, que abarca no sólo a los sectores más humildes si no también a muchos sectores de clase media que tampoco podrían acceder si no es con la autogestión.

Para finalizar disparó, “creemos que en el plan PROCREAR tiene que haber un “subprograma”  que permita que en todo el país se construya bajo la autogestión, que no solo construye  vivienda sino también construye una sociedad, construye una comunidad y construye democracia o sea dignidad”.